Lo que está saliendo a la luz no es un rumor ni una teoría conspirativa más. Es una trama documentada que conecta corrupción internacional, financiamiento político oscuro y favores millonarios que hoy se pagan con dinero público.

Detrás del discurso de austeridad del presidente panameño José Raúl Mulino, aparecen contratos directos, mudanzas inexplicables y un nombre que se repite en todos los expedientes incómodos: el clan Carretero Napolitano. Empresarios con un historial ligado a Odebrecht, a la famosa caja 2 de sobornos y a viejos escándalos que, lejos de cerrarse, parecen haberse reciclado bajo una nueva administración.

Pero la historia no termina en Panamá.

En Venezuela, uno de los protagonistas sobrevive milagrosamente a un accidente aéreo que muchos califican como intento de asesinato, a bordo de un avión vinculado a una institución pública. Las sospechas apuntan a una guerra interna de poder, donde operadores financieros del régimen compiten por el control del botín, desplazando incluso a figuras como Alex Saab.

¿Casualidad? ¿O el precio de volverse demasiado poderoso?

La pieza clave aparece cuando se reconstruyen los días previos a las elecciones de 2024, con reuniones secretas fuera del país, financiamiento de última hora y un pacto sellado entre Panamá, Caracas y La Habana para garantizar continuidad, impunidad y negocios.

👉 En el vídeo revelamos los nombres, las fechas, las empresas y el mecanismo exacto del acuerdo.
Nada de titulares vacíos. Todo el contexto que no te cuentan.




Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *