La detención de los hermanos Daniel José, Levin Salvatore y Carmelo De Grazia Suárez, accionistas mayoritarios de la entidad financiera Bancamiga, ha sacudido el sector bancario venezolano. Los tres fueron aprehendidos el pasado 19 de abril, acusados de graves delitos como traición a la patria, distracción de fondos públicos, aprovechamiento de influencias indebidas, legitimación de capitales y asociación para delinquir.
La noticia de las detenciones no sorprendió al excomisionado de seguridad de Juan Guaidó, Iván Simonovis, quien comentó en la red social X: «Los De Grazia en desgracia. Desde hace 3 años se viene hablando de esta bandita de choros, pero @TarekWilliamSaab se enteró hace unos días que Bancamiga es una lavadora. Una banca no tan amiga.»
Los De Grazzia en desgracia.
Desde hace 3 años se viene hablando de esta bandita de choros, pero @TarekWilliamSaab se enteró hace unos días que Bancamiga es una lavadora.
Una banca no tan amiga. pic.twitter.com/5eDMrBlRlF
— Iván Simonovis (@Simonovis) April 21, 2024
Vínculos con la trama Pdvsa-Cripto
Según la Superintendencia de las Instituciones del Sector Bancario (Sudeban), los hermanos De Grazia están siendo investigados por sus presuntos vínculos con la trama de corrupción conocida como Pdvsa-Cripto, en la cual se habrían desviado 16.600 millones de dólares de los fondos de la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa).
La detención de los De Grazia se produjo poco después de la imputación del exministro de Petróleo, Tareck El Aissami; el empresario Samark López Bello y el exministro de Economía, Simón Alejandro Zerpa, por su presunta participación en el desvío de fondos de Pdvsa mediante una trama que involucraba el uso de criptomonedas.
A pesar de las graves acusaciones en su contra, los hermanos De Grazia eran conocidos en su ciudad natal de Upata, estado Bolívar, como benefactores del Sistema de Orquestas y otras instituciones culturales. Daniel José De Grazia Suárez, de 48 años, es abogado egresado de la Universidad Católica Andrés Bello y tiene experiencia en el sector financiero.
Sudeban ha asegurado que las operaciones de Bancamiga «continuarán con normalidad» pese a la detención de algunos de sus directivos investigados por su presunta participación en el caso Pdvsa-Cripto. Sin embargo, el futuro de la entidad financiera y de sus accionistas mayoritarios permanece incierto mientras avanza la investigación.
