Otro escándalo financiero sacude a Venezuela. Según investigaciones judiciales, el empresario David Brillembourg, en complicidad con Roberto Añez, accionista de la aerolínea Avior Airlines y Juan Ramírez, directivo del Nodus International Bank, banco en proceso de liquidación en Puerto Rico, obtuvieron una asignación de más de 400 millones de dólares del Fondo Chino para construir una planta incineradora de basura en el estado Zulia. Sin embargo, los recursos presuntamente fueron desviados a cuentas personales y empresas ficticias, dejando el proyecto sin concretar.
Presuntamente, Mercedes Cecilia Añez y Chad Noah Stark, hija y yerno de Roberto Añez, respectivamente utilizaron la empresa White Cap Construction como vehículo para ejecutar la operación irregular. Esta sospecha arroja luz sobre las complejas estructuras que envuelven el presunto desvío de fondos públicos.
El imperio Brillembourg Capriles bajo la lupa
En su página web, Brillembourg se presenta como el fundador, junto a su madre Tanya Capriles de Brillembourg, del Grupo Brillembourg Capriles GBC. Esta entidad, según informa, administra 500 millones de dólares y posee inversiones en bienes raíces por más de mil millones. Sin embargo, las acusaciones apuntan a que parte de este vasto imperio financiero podría haberse cimentado sobre prácticas ilícitas.
Añez, una suerte de agente contable de la sociedad Brillembourg Capriles, no es ajeno a los escrutinios legales. En el pasado, fue investigado por autoridades federales de Estados Unidos y sancionado con una multa de tres millones de dólares por presuntas actividades de «money transmitting» u operaciones clandestinas de transferencia de fondos con fines ilícitos.
Antes de fundar el Grupo Brillembourg Capriles, Añez y Brillembourg presuntamente utilizaron las entidades financieras Brilla Group y Brilla Bank de Santa Lucía para realizar operaciones en perjuicio del Estado venezolano y desviar gran parte de los 400 millones de dólares liquidados por el Fondo Chino en Bancoex.
Complicidades y redes internacionales
Juan Ramírez, del Nodus International Bank, también habría estado involucrado en la trama. Según las investigaciones, utilizó al Banco Espíritu Santo en Portugal, y en conjunto con Brillembourg, el Bancrédito International Bank en Puerto Rico, propiedad de Julio Herrera Velutini, quien enfrenta acusaciones de sobornos a Wanda Vázquez, exgobernadora puertorriqueña.
Fuentes cercanas al caso revelan que se está formando un grupo de presuntas víctimas del clan Añez-Brillembourg, con el propósito de introducir una demanda «Class action» en Puerto Rico contra el Grupo Brillembourg Capriles, David Brillembourg, Tanya Brillembourg, Roberto Añez y Mercedes Añez.
Mientras tanto, se alega que los hermanos Añez utilizan sus influencias en las altas esferas judiciales para detener su imputación en Venezuela, añadiendo una capa más de complejidad a este enredo de aparente corrupción, según informó Alberto News.
La opulencia en medio de la controversia
Según fuentes judiciales, tras el presunto desfalco del Fondo Chino por más de 400 millones de dólares, Roberto Añez, dueño de Avior Airlines, adquirió recientemente un jet privado Cessna valorado en 8 millones de dólares y una lujosa residencia en 630 San Juan Drive, Coral Gables, por más de 3.5 millones de dólares.
